Conocer ciudades nuevas siempre es un excelente plan para realizar. Lo que suele ser más complicado es la temporada que se elige, ya que la cantidad de turistas que van a un mismo lugar puede generar estrés e incomodidad. Lo ideal es que grandes ciudades puedan ser recorridas en momentos en donde no hay tanta aglomeración de gente, con el fin de poder aumentar el disfruta y la forma en la que se conocen.
En este artículo se detallan ocho ciudades argentinas que pueden ser conocidas en momentos de baja temporada. Los motivos varían y pueden ser diferentes, pero lo central es que se permite conocer la ciudad de diferentes formas, explorando rincones más pequeños que no suelen estar dentro de los típicos programas de turismo.
LAS OCHO CIUDADES ARGENTINAS IDEALES PARA CONOCER EN TEMPORADA BAJA
1. Salta: durante el otoño, Salta ofrece un clima más fresco y agradable en comparación con el calor del verano. Además, al ser temporada baja, hay menos turistas, lo que te permite disfrutar de los cerros y montañas sin aglomeraciones. Esto significa que se puede explorar a un propio ritmo, absorber la belleza natural y cultural de la región, y participar en actividades como senderismo, visitas a bodegas locales y descubrimiento de sitios históricos sin las largas filas o la congestión de turistas. Lo positivo es que el paisaje no varía tanto en función de las estaciones del año, por lo que recorrerlo en cualquier mes es casi lo mismo.
2. Mendoza: esta región es famosa por sus viñedos y paisajes montañosos. En otoño, los colores de las hojas cambiantes añaden una belleza especial a la experiencia. Fuera de la temporada de la Vendimia, Mendoza es más tranquila, permitiéndote disfrutar de catas de vino más íntimas y recorridos relajados por los viñedos. Sin dudas que es una excelente opción para todos aquellos que no les gusta tomar alcohol, ya que permite explorar el área gastronómica. Además, con menos visitantes, es más fácil conocer los parques y áreas naturales en su esplendor otoñal.
3. Parque Nacional Talampaya, La Rioja: en otoño, este parque se vuelve más accesible debido a las temperaturas más suaves, en comparación con el calor extremo del verano. Menos turistas también significan que puedes disfrutar de las formaciones rocosas y sitios arqueológicos con más tranquilidad y atención, sumergiéndote en la historia natural y cultural de la región. Al estar en épocas con menos gente, el paisaje se puede apreciar de otra forma, porque se pasa a vivir como un local. Ni hablar de cuando se recorren ciudades más pequeñas lejos de los grandes centros turísticos.
4. Traslasierra, Córdoba: este destino es ideal para quienes buscan desconectar en la naturaleza. Durante la temporada baja, se pueden conocer las Sierras Grandes con menos gente, lo que permite una experiencia más auténtica y relajante. Se puede disfrutar del avistamiento de aves y del trekking sin las aglomeraciones típicas de otras estaciones. La tranquilidad que se gana al estar menos poblado permite, además, que los animales circulen más por los parques, volviéndose un espacio cómodo y hermoso para disfrutar de flora y fauna clásicos argentinos.
5. Cataratas del Iguazú, Misiones: en otoño, las Cataratas del Iguazú ofrecen un clima más fresco y cómodo para explorar la selva circundante. Con menos visitantes, es ideal para apreciar la majestuosidad de las cataratas en un entorno más íntimo. Además, hay mucho más espacio para disfrutar de las caminatas y actividades en el área. Ni hablar que los centros urbanos que circundan este lugar son ideales para conocer y comprar algunos regalos y souvenirs para traer.
6. El Calafate, Santa Cruz: durante el otoño, los paisajes del Parque Nacional Los Glaciares son igualmente impresionantes pero con menos visitantes. Esto significa que se pueden realizar excursiones y actividades como caminatas en el glaciar Perito Moreno o navegaciones por los lagos con más espacio y a un costo potencialmente menor. Ir en invierno, por más que sea uno de los momentos más elegidos, se vuelve incómodo para las personas ya que la cantidad de gente hace que se ralentice el tránsito y todo sea más lento. Primavera también puede ser una buena opción.
7. Bariloche, Río Negro: en esta época del año, Bariloche ofrece un clima fresco pero agradable, perfecto para disfrutar de actividades al aire libre como ciclismo, senderismo y kayak. Con menos turistas, explorar los lagos y montañas con mayor tranquilidad y disfrutar de la belleza natural en un ambiente más relajado se vuelve clave para conocer este hermoso paisaje. Antes las temporadas de verano eran las más elegidas para conocer el sur, pero se pusieron de moda por lo que ahora se recomienda otoño o primavera.
8. Buenos Aires: aunque Buenos Aires es un destino popular durante todo el año, en otoño puedes disfrutar de un clima más templado y agradable para explorar la ciudad a pie. Con menos turistas, habrá muchas más oportunidades para participar en eventos culturales locales, visitar museos y disfrutar de la escena gastronómica sin las aglomeraciones típicas de otras estaciones. De todas formas, es una ciudad cuyo clima no suele variar mucho entre estaciones por lo que escoger meses suele ser lo mismo.
En caso de tomar la decisión de conocerlas en momentos más tranquilos, es fundamental tener en cuenta que los precios pueden llegar a cambiar, quedando más en beneficio del turista. Esto suele suceder con más frecuencia en la zona de la Patagonia, ya que en tiempos de menos flujo de visitantes, los centros hoteleros o gastronómicos bajan sus tarifas con el fin de atraer más personas.
Ahora bien, también es bueno tener en cuenta que en temporada baja algunos espacios suelen cerrar ya que se enfocan en realizar las tareas de mantenimiento y arreglar todos aquellos rincones que quedaron afectados por el constante uso durante los tiempos de mucha circulación de turistas.