El equipo argentino logró una victoria histórica en la Copa Davis el 27 de noviembre de 2016, con un desempeño destacado de Del Potro frente a Cilic en un emocionante partido a cinco sets, mientras que Delbonis dominó a Karlovic de manera impresionante. Bajo la dirección de Orsanic, el equipo logró romper una larga racha de adversidad y finalmente se llevó a casa el codiciado trofeo de la Copa Davis, un momento sumamente esperado y celebrado por el tenis argentino.
Hace siete años, el 27 de noviembre de 2016, Argentina se consagró campeón de la Copa Davis por primera vez en su historia en Zagreb, la capital de Croacia, en una jornada memorable. Fue un domingo fenomenal en el que Juan Martín Del Potro y Federico Delbonis protagonizaron dos victorias épicas que dieron vuelta el marcador de 2-1 a favor del equipo argentino.
El triunfo de Del Potro fue especialmente notable, ya que logró una remontada increíble después de estar dos sets abajo contra Cilic, quien en ese entonces era el número 6 del mundo. En cuanto a la actuación de Delbonis, su victoria fue destacada por la calma y solidez con la que derrotó en sets consecutivos al imponente Karlovic.
La gesta del triunfo argentino comenzó a tomar forma desde el primer día, cuando Del Potro logró vencer a Karlovic después de la reñida caída de Delbonis frente a Cilic. Sin embargo, el momento culminante se produjo con otra victoria trabajada pero épica del jugador de Tandil, que empató la serie en un momento en el que todo parecía encaminado para que Croacia alzara, una vez más, la Copa Davis.
En el Arena Zagreb, todos los recuerdos de las cuatro finales anteriores, con sus respectivos fantasmas, parecían cobrar vida, pero Argentina supo enfrentarlos con firmeza y aplomo.
En el transcurso de ese 2016, el camino de Argentina en la Davis comenzó con la victoria por 3-2 sobre Polonia. Posteriormente, continuó con triunfos por 3-1 ante Italia en los cuartos de final, seguido de un emocionante 3-2 frente a Gran Bretaña en las semifinales. Este trayecto culminó en la mencionada final, en la que el equipo argentino se impuso 3-2 sobre Croacia.
Con la obtención de este título, Argentina finalmente saldó una larga deuda pendiente en el torneo, recordando derrotas anteriores en cuatro finales: frente a Estados Unidos en 1981, Rusia en 2006 y ante España en 2008 y 2011.
Este logro se produjo en un momento particularmente desafiante para el tenis argentino a nivel individual, ya que en ese momento solo contaba con un jugador posicionado entre los cuarenta primeros del ranking ATP. Sin embargo, durante ese año, el retorno de Juan Martín Del Potro fue destacado por su regreso notable en el circuito, así como por su sobresaliente desempeño en los Juegos Olímpicos, donde obtuvo la medalla de plata.
La culminación de este excepcional año para Del Potro fue la coronación en la Davis, representando un logro monumental para el tenis argentino y para el deporte nacional en su conjunto. La tan ansiada Ensaladera ya reposa en las vitrinas argentinas, marcando un hito significativo en la historia del tenis en el país.
Ganar la Copa Davis ya no es un sueño inalcanzable ni una serie de frustraciones difíciles de superar. Ahora es una realidad. El equipo dirigido por Daniel Orsanic derribó todos los mitos y logró un título mundial que con el tiempo será aún más valorado.
En el cuarto punto, Juan Martín Del Potro experimentó un momento histórico al remontar por primera vez en su carrera una desventaja de dos sets, algo que no había logrado en 14 ocasiones anteriores en situaciones similares. Venció a Cilic con un marcador de 6-7 (4), 2-6, 7-5, 6-4 y 6-3. La clave estuvo en resistir los momentos destacados de su rival, quien cerró el partido con 34 aces pero finalmente no logró la victoria.
