En TikTok, Romina se volvió viral por su intento ingenioso y valiente de combatir lo que algunos llaman la “depresión dominguera”. Decidió enfrentar el aburrimiento del fin de semana de una manera poco convencional: hablándole a todos los chicos que le gustaban, en busca de una cita.
“Como tetas y vergüenza nunca tuve, le voy a hablar a todos los pibes que me gustan para ver si alguno quiere hacer algo para combatir la depre”, anunció con una sonrisa en su rostro. Con valentía, comenzó a enviar mensajes a varios hombres, preguntando sobre sus planes para el día.
Romina no escatimó esfuerzos y envió mensajes llenos de entusiasmo a sus posibles acompañantes del domingo. A pesar de que algunos chicos la ignoraron previamente, a ella no le importó,mostrando un admirable espíritu de determinación.
Romina también decidió tomar un enfoque diferente y se propuso hablar con un vecino que le interesaba. Con humor, compartió su plan de decirle que no tenía luz, con la esperanza de que la invitara y compartieran una copa de vino.
Después de hablar con todos los chicos, Romina miró a la cámara con nerviosismo, esperando ansiosamente una respuesta positiva. Su alegría estalló cuando finalmente recibió una respuesta. Pero, para su sorpresa, no era un posible pretendiente, sino su propio padre.
“Ah, no, es mi viejo. Mi papá me pasa a buscar en quince minutos y me lleva a cenar. Bueno, igual creo que cumplí con mi objetivo porque al menos hice algo y me moví. La depresión dominguera la estoy combatiendo. Está mal, pero no tan mal”.
A pesar de la decepción, Romina se mostró positiva y reflexionó sobre su día. Consideró que, al menos, había hecho algo y se había movido para combatir la “depresión dominguera”. Reconoció que aunque las cosas no salieron exactamente como esperaba, su valentía en sí misma fue una victoria.
En los comentarios, los usuarios de TikTok elogiaron la valentía de Romina y destacaron la importancia de atreverse a dar el primer paso. Algunos compartieron sus propias experiencias y admiraron la actitud de Romina ante la situación.
“Yo ni a palos le mando nada a nadie”, “yo espero que me vengan a buscar ellos”, “te admiro”.